Un día en el Mercado de Motores de Madrid | Petite Allure Petite Allure: Un día en el Mercado de Motores de Madrid

Un día en el Mercado de Motores de Madrid

Hola Petites!

Este fin de semana por fin he tenido la oportunidad de ir al Mercado de Motores de Madrid (celebrado en el Museo del Ferrocaril), desde que llegué de Londres todavía no había podido acudir y he de decir que ¡me encantó!


Entre los antiguos vagones de Renfe y los raíles del tren, los pequeños stands se sucedían uno tras otro con piezas exclusivas vintage que no dejaban indiferente a nadie.


Un puesto que llamó mi atención al instante fue el de Gafa Vintage en el que se podían adquirir gafas y monturas de firmas como Versace o Dior por precios que oscilaban los 150 euros. 


Las amantes de los zapatos también tenían a su disposición multitud de pares de firmas como Prada o Jimmy Choo, aunque claro, el problema aquí residía en el número. Estas sandalias negras y doradas únicamente estaban disponibles en el 35, un poco pequeño para mí, pero quizás perfecto ¡para ti!


Reconozco que las pajaritas de José Zambrano se convirtieron en mi debilidad nada más verlas. Es una pena que ninguno de los chicos de mi casa todavía prefieran las corbatas ¡y mira que insisto para que se decanten por las pajaritas! Las tonalidades vivas y los distintos estampados eran simplemente increíbles. Me quedé completamente absorta observándolas.



No me puedo olvidar de Cosas bonitas que encuentro, donde no me pude resistir a comprar una falda preciosa elaborada en París de color crema. Ya os la enseñaré y también os hablaré más en profundidad de esta firma para que también podáis disfrutar de las prendas únicas que posee. 


Después de darnos un paseo por el mundo de la moda, nos vamos directamente a la decoración. Ideas de lo más originales, muebles retro que me recordaban a la serie Mad Men y también la mezcla de estilo rústico e industrial que tanto me gusta.







Y por último, unas imágenes tomadas a primera hora de la mañana del sábado donde ya se puede vislumbrar el buen ambiente que había en la zona de tapeo, donde las croquetas, el bocadillo de jamón y el de tortilla se evaporaban a la misma velocidad con la que entraban los nuevos visitantes al Mercado de Motores. 



 Pics: Petite Allure

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